miércoles, 3 de febrero de 2010

Strangers in the night


Martes 2 de febrero. Día de la Candelaria, o lo que es lo mismo, ocasión perfecta para nutrirse de lo lindo con tamalitos y empujárselos con atole.

Mi madre ha organizado el convivio en su casa y nosotros hemos llegado impuntuales a la cita. Ya para cuando arribamos, el comedor ha sido atacado y los invitados están ya en la tercera tanda de chismes. Sin embargo, de los presentes, conozco al 25%, lo que me hace decirle a mi santa madre que ya chole con andar invitando a puro stranger y weirdo, de esos que de pronto salen como tut tíos y no son más que el primo de la ex esposa del tío Humberto Rubén que se enlazó en su tercer matrimonio con doña Felicitas, viuda de Ordóñez. Así se las ingenia mi madre para sacar parentesco y hacer "bola".

Por lo mismo, mi reclamo es doble cuando mi hermosa antecesora me informa que la cuadrilla de extraños se ha terminado, entre otras cosas, el atole de fresa que, dicho sea de paso, para mí es como sacramento. No lo perdono. Y admito que expreso claramente mi descontento por tal situación. Hemos viajado la Generala Rosa y yo 18 largos kilómetros para ver cómo un señor que ni conozco y que se dice oriundo de Silao (WTF!), se limpia el mostacho por si le quedan residuos de MI atole favorito.

Ya en tal mood y con una resignación salpicada de frustración, a cenar y a fletarse las clásicas de la "familia": "Yo conocí a tu abuelo", "Una vez aposté con tu papá y le gané 10 mil pesos, pero tú no te acuerdas porque eras un niñito así, mira, así de chiquito" (y te muestran con el dedo que medías como 56 centímetros de suelo a cabeza), "Tu mamá, así como la ves, era una chamaquita muy inquieta", etc.

De pronto, cuando la amargura me chacaleaba por la falta de atole en las venas... lo increíble. Sale mi madre de la cocina con una taza humeante. Se acerca y la coloca frente a mí. Es atole de fresa, calientito, apatecible como nunca, maravilloso. "Ten tu atole, mi vida", me dice.

No, no, no, bueno, qué les puedo yo decir. Qué les cuento que no se imaginen. Mi sonrisota es directamente proporcional a las ganas que tienen los strangers de ahorcarme. Y eso porque uno de ellos, el de Silao, me sale con que: "Tu mamá nos dijo que ya no había más atole de fresa y resulta que sí. Le pedimos y nos dijo que se había acabado". Es oficial, amo a mi madre más que nunca.

20 minutos después, el atole de fresa (ahora sí) se ha terminado y yo me lamo mi inexistente mostacho mirando fijamente a la bola de incautos que nos han hecho el favor de gorronear esta noche, con la excusa de que somos "familia" porque mi tío Alberto se metió con la "Brigitte" y de ahí salió Clarita, la prima de mi tía Hortensia, la de los chiles en nogada buenísimos que nunca he probado, pero que son tradición de nuestro apellido. Ajá.

No debo ni decirlo en voz alta. No volveré a dudar jamás, jamás, jamás de mi santa madre. Amo a mi lindísima güerita de ojos verdes.

17 comentarios:

  1. Todavía no acabo de reirme...........

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  2. queeee rico!!!, se me antojó ese atole!

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  3. PoR Lo QuE VeO El AtolE De FreSa SuEnA DeLiCioSo.. PeRo Un FaVoR DilE A Tu MaMi QuE FaLtO Una ExTraÑa MaS Al ConviVio SaNChEz Y AlCuRnIA.. Yooooooooo.. No Se Lo PeRdonArE..JaJaJa

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  4. Me encan´tó la cadena de parentezco, jeje

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  5. ¿Silao? Por más que intento saber y enterarme de qué es eso, no logro dar en el mapa con Silao, que fue lo que me llamó la atención, dentro de todas las cosas que mencionas del día de la candelaria.
    Y sí, tambien se me antojó ese atolito de fresa, liujjjjj

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  6. Si me enseñaron bien geografía Silao es municipio de Guanajuato, pero no tiene naada que ver con que el tío se relama los bigotes mientras osa pedir más atole sin importarle si alguien faltaba, de esos parientes son los que me rechoca encontrar en casa de mi ma’, suelo emprender la retirada rápidamente, sobre todo cuando al llegar mi sacrosanta madre me receta la de: “ya no hay flaquita, te toca preparar más”.

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  7. jajajaja, no cabe duda, eso solo lo hacen las mamás!

    lo que yo no entiendo, es si teniendo una mamá tan linda de donde sacaste lo chacal!!! :P

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  8. NO SUBESTIMEMOS A LAS MAMÁS, ELLAS SIEMPRE PIENSAN EN NOSOTROS(AS).

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  9. Mi madre es clara pero igual de entrañable:

    Si hay, pero es de mi hijo(a).

    Y frieguense los que quieran mi propiedad.

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  10. A Silao se le distingue desde la carretera sin entrar al pueblo, porque huele a caca a kilómetros. Hay harto puerco, de ahí el olor, de ahí la simpatía del amigo.

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  11. la mamá siempre sabe como hacerlo!
    NNK

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